Día 6
Llegamos al fin de esta semana en la cual hemos estado estudiando la porción de la palabra que está en Isaías 44:3-4 “mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos; y brotaran entre hierba, como sauces junto a las riberas de las aguas” culminemos hoy este rico pasaje.
Nuestro Dios nos promete enviar su Espíritu Santo para que sea derramado sobre nosotros en un acto carente de mezquindad pues dice que será derramado, esto nos da una visión que el mismo se hará sin medida y sin reparo, este derramamiento es para nuestra generación es por ende una respuesta a la situación actual de cada uno de nosotros, Dios no se ha olvidado de nosotros y nos rescatará.
La bendición de este derramamiento seguirá hasta nuestros renuevos, estos renuevos pueden ser todo aquello que salga de ti y tenga vida por sí misma, podría ser un hijo, un sueño o un proyecto, sea lo que sea será alcanzado por la bendición de Dios que fue derramada por medio de Su Espíritu Santo.
Estos renuevos saldrán de en medio de las hierbas para llegar a convertirse en un árbol donde pueden anidar las aves, un árbol fuerte, sano y vigoroso que tiene características especiales y únicas, tal como lo eres tú y yo, un ser creado por Dios con características que no se encuentran en otro ser humano.
Al culminar esta semana alabemos a Dios, primeramente por sus maravillosas promesas, pero sin olvidar su increíble amor y misericordia al derramar de Su Espíritu Santo sobre nosotros, impartiendo bendición y fortaleza para vencer las circunstancias y levantarnos vencedores en medio de todo, oremos para que le anhelemos y amemos día tras días hasta que le veamos frente a frente ¡Amén!
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