Domingo 1 de Noviembre de 2015
Dios puede transformar tu vida
Romanos 6:21-23 “¿Pero qué fruto teníais de aquellas cosas de las cuales ahora os avergonzáis? Porque el fin de ellas es muerte. Más ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna. Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.”
Hay cosas que fueron parte de tu vida cuando vivías a espaldas de Dios, conductas que denotaban una vida apartada de Él, eras una persona digna de muerte ¿Por qué? Porque estabas separado de Dios, es una muerte espiritual, es una separación merecida por la eternidad.
Pero cuando tienes una nueva vida en Cristo transformas tu cultura, eres una nueva persona, y eres hecho siervo de Dios, libertado del pecado, es una invitación de la verdad a mi vida, porque Él es verdad, su Espíritu viene a morar en mi vida y se inicia una confrontación entre las mentiras en las que vivía y la verdad en la que vivo ahora, esto no es de repente, es un proceso.
La verdad de Dios, es una verdad que impacta toda tu vida, cuando vivimos en la mentira no hay paz, es un sentir que carcome el ser, que autodestruye, pero Jesús fue muy claro cuando mandó a amar a Dios para que tu corazón y tu vida refleje a Él, nos manda a amar a Dios con todo nuestro ser, para que al final de este proceso podamos vivir por la eternidad con Él, esta es nuestra meta.
Habrá un lugar donde los que aman a Dios tendrán responsabilidades en el mundo de lo eterno, como dice en su palabra “si en lo poco has sido fiel, en lo mucho te pondré”. El capítulo 6 cierra diciendo de una manera muy clara que la paga de la vida pecaminosa es la muerte, te degradas, si no lo detienes se apodera de ti, se vacía tu alma, pero si vienes al Señor Jesús tu vida cambia, puedes arrepentirte y fundamentarte en la verdad para que Dios pueda hacer algo nuevo en tu vida.
Pastor Samuel Olson
Culto dominical 25 de octubre de 2015
