Hombres de fe
1 Corintios 2:9 “Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman.”
Estamos viviendo tiempos difíciles, como individuos, como familia, es muy frecuente escuchar entre familiares y amigos que hay escasez, inseguridad, todo esto sin sumar las diferentes situaciones familiares que se pueden presentar, de verdad vivimos una situación difícil, todos tenemos algo que nos aqueja.
Él hará, es Todopoderoso ¿Le amas? Lo que ojo no vio, ni oído escuchó Dios lo tiene hoy preparado para ti, al ver este verso podríamos pensar ¿Era para el pasado o para el tiempo presente? Dice su Palabra que Dios se reveló a su Espíritu que todo lo escudriña, y su Espíritu está con nosotros, su Palabra trata de maravillas, de hechos reservados para los que le aman.
Quizás nos preguntamos ¿Cómo hacer? ¿Cómo hacer para ver lo que ojo no ha visto ni oído escuchado? A través de la fe, es por la fe que podemos ver y escuchar lo que Dios tiene reservado en este tiempo, si tenemos fe como un grano de mostaza podemos decir a un monte que se traslade de un lugar a otro, por fe Abraham se convirtió en padre de naciones, por fe Sara fue madre a los 90 años.
La Biblia nos dice que la fe es la certeza de lo que se espera, y también nos dice que es la convicción de lo que no se ve, tu sabes qué esperas ver, no podemos esforzarnos tratando de crear la fe pues es un don, estamos acostumbrados a actuar más por vista que por fe, es una enseñanza del mundo natural.
Durante muchos años el Señor me estuvo formando, por formación soy un hombre de ciencia, pero soy hombre de fe por convicción y cuando se requiere más que ciencia no aplico mi razón sino mi corazón, y creo en mi Señor, porque sé que Él es mayor que el conocimiento humano, lo que no podemos hacer aun con ayuda de otros, Él si lo puede hacer.
José Zabala
Culto de ministración del Espíritu Santo 15 de noviembre de 2016