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Domingo 13 de Septiembre de 2015

Boletin13.9La ley es la voluntad de Dios revelada

Romanos 5:18-21 “Por tanto, así como una sola transgresión causó la condenación de todos, también un solo acto de justicia produjo la justificación que da vida a todos. Porque así como por la desobediencia de uno solo muchos fueron constituidos pecadores, también por la obediencia de uno solo muchos serán constituidos justos. En lo que atañe a la ley, ésta intervino para que aumentara la transgresión. Pero allí donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia,  a fin de que, así como reinó el pecado en la muerte, reine también la gracia que nos trae justificación y vida eterna por medio de Jesucristo nuestro Señor.”

Dios hizo lo que tenía que hacer para el perdón de pecados, fue un acto de justicia de uno para corregir el acto de trasgresión de otro, así actúa la gracia de Dios, como el pecado entró a todos por uno, su acto de salvación es suficiente para todos también, pero deben creer. Si no cree en la obra redentora de la cruz del calvario no puede entender la vida que hay en Dios, ni se puede confiar a Él.

Una vez en Cristo reina la gracia, a partir de ese momento comenzamos a vivir en Cristo y esa gracia detiene la maldad, empieza a cambiar nuestra vida dándonos vida, es cómo ir al médico y ver cómo tiene la respuesta a todas nuestras preguntas, comenzamos a sentirnos libres de toda atadura, llenos de su gracia y su amor, caminamos con la frente en alto llenos de los pensamientos de Dios.

Ahora, la ley de Dios es su voluntad, pero ¿Por qué se introduce? Primero es una lección de amor, cuando tenemos una disciplina en nuestro hogar es para mantener un orden, no es un castigo, Dios da una ley para el bienestar de la persona, no es para juzgarnos, tampoco da vida ni condena, ni te hace pecar o te justifica.

¿Entonces qué hace? La ley da conocimiento del pecado, me ayuda a entender lo que no sirve de mi vida y me ha hecho daño como consecuencia, hay pecados que ni nos damos cuenta que nos hacen mal, pero conocemos la ley de Dios y vemos cómo hemos trasgredido el corazón de Dios. Algunos piensan que la ley está para tentarnos ¡de ninguna manera! Dios no está allí para tentarte. La ley me sirve, me da conocimiento de lo que no es bueno, de lo que es y no es la verdad, se puede decir que la ley le da vida al pecado, me doy cuenta de que soy pecador al ver la ley.

La ley me da una muestra del carácter del pecado, me siento mal, molesto conmigo mismo , con los demás, descubro que cometo errores y por ello hay tanto daño en mi vida, cómo llena de temores, dudas y  juicios, abre mis ojos para ver que soy pecador y necesito ayuda, muchos se creen muy buenos pero en privado saben cuán pecadores son y cómo esto les ha hecho daño, el pecado desmoraliza, degrada, confunde, tuerce el camino del ser humano y debemos buscar el camino para comenzar una vida honesta, llena de la paz de Dios.

La ley es buena, te da dirección, de muestra que cometes errores, te guía para decirte es por aquí, no es por allí, está ahí para demostrarte cómo ese pecado esta en tu corazón torciendo tu alma, porque el pecado nos confunde, nos engaña y nos hace creer que hemos subido a las alturas de la vida donde somos intocables haciéndonos caer, debemos saber que el poder de Dios se manifiesta en la debilidad, cuando caigo no tengo porqué quedar allí, bástate de su gracia y su poder se manifestará en tu debilidad, no tienes que quedarte en el hoyo, levántate de nuevo y cambia tu corazón para que puedas servir de nuevo.

Pastor Samuel Olson
Culto dominical 6 de septiembre de 2015

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