Boletín 13 de diciembre de 2015
La intercesión del justo
Génesis 18:16-33 “Luego aquellos visitantes se levantaron y partieron de allí en dirección a Sodoma. Abraham los acompañó para despedirlos. Pero el Señor estaba pensando: «¿Le ocultaré a Abraham lo que estoy por hacer? Es un hecho que Abraham se convertirá en una nación grande y poderosa, y en él serán bendecidas todas las naciones de la tierra. Yo lo he elegido para que instruya a sus hijos y a su familia, a fin de que se mantengan en el camino del Señor y pongan en práctica lo que es justo y recto. Así el Señor cumplirá lo que le ha prometido.» Entonces el Señor le dijo a Abraham: El clamor contra Sodoma y Gomorra resulta ya insoportable, y su pecado es gravísimo. Por eso bajaré, a ver si realmente sus acciones son tan malas como el clamor contra ellas me lo indica; y si no, he de saberlo. Dos de los visitantes partieron de allí y se encaminaron a Sodoma, pero Abraham se quedó de pie frente al Señor. Entonces se acercó al Señor y le dijo: ¿De veras vas a exterminar al justo junto con el malvado? Quizá haya cincuenta justos en la ciudad. ¿Exterminarás a todos, y no perdonarás a ese lugar por amor a los cincuenta justos que allí hay? ¡Lejos de ti el hacer tal cosa! ¿Matar al justo junto con el malvado, y que ambos sean tratados de la misma manera? ¡Jamás hagas tal cosa! Tú, que eres el Juez de toda la tierra, ¿no harás justicia? El Señor le respondió: Si encuentro cincuenta justos en Sodoma, por ellos perdonaré a toda la ciudad. Abraham le dijo: Reconozco que he sido muy atrevido al dirigirme a mi Señor, yo, que apenas soy polvo y ceniza. Pero tal vez falten cinco justos para completar los cincuenta. ¿Destruirás a toda la ciudad si faltan esos cinco? Si encuentro cuarenta y cinco justos no la destruiré —contestó el Señor. Pero Abraham insistió: Tal vez se encuentren sólo cuarenta. Por esos cuarenta justos, no destruiré la ciudad —respondió el Señor. Abraham volvió a insistir: No se enoje mi Señor, pero permítame seguir hablando. Tal vez se encuentren sólo treinta. —No lo haré si encuentro allí a esos treinta —contestó el Señor. Abraham siguió insistiendo: Sé que he sido muy atrevido en hablarle así a mi Señor, pero tal vez se encuentren sólo veinte. Por esos veinte no la destruiré. Abraham volvió a decir: No se enoje mi Señor, pero permítame hablar una vez más. Tal vez se encuentren sólo diez. —Aun por esos diez no la destruiré —respondió el Señor por última vez. Cuando el Señor terminó de hablar con Abraham, se fue de allí, y Abraham regresó a su carpa.”
En este pasaje nos encontramos con la oración de intercesión de Abraham por el pueblo de Sodoma y Gomorra, la semana pasada vimos el ejemplo de Pablo y cómo se salvaron 275 hombres por un justo que intercedió por todos los que estaban allí, si vemos el ejemplo de Jonás es una situación totalmente distinta, Nínive era una ciudad que se iba a perder por la mala actitud de Jonás, tuvo que pasar por la experiencia de ser tragado por una ballena para que decidiera ir a esta ciudad que no tenía siquiera un justo, toda la ciudad fue salva, y se sintió muy mal porque todas estas personas se iban a perder por su actitud.
Dios tiene sus maneras de llamarnos la atención para hacernos obedecer, la ciudad de Caracas está llena de justos, por eso esta ciudad no se va a perder, Dios no es injusto para con los justos, sacudirá la ciudad, el país, lo ha venido haciendo porque hay mucha maldad, pero hay justos que han doblado rodilla para interceder por nuestro país, es la oración del justo que puede mucho.
Habían dos formas de ser, una era la de Abraham, hombre justo y noble, y la de Lot, que se dejaba llevar por las peleas, tenía falta de autoridad incluso en su familia, por lo que Abraham decide que debe separarse de Lot, es así como Lot se asienta cerca de Sodoma y Gomorra viviendo finalmente allí, en una ciudad que es como las ciudades de hoy día, que contaminan y tienen movimientos sociales que no edifican, el pecado era terrible.
Tu vida es una vida llamada por Él para bendición de los que te rodean, es una encomienda para edificación, para acabar con el pecado ¿Influyes en los que te rodean? Lot no se salvó de la destrucción que Dios hizo sobre Sodoma y Gomorra porque era justo, se salvó por la intercesión de Abraham ¿Entiendes tu rol en la sociedad ahora que estás en Cristo? A través de tu vida otros pueden llegar y conocer la vida en Dios para así vivir en la esperanza que hoy tienes ¿Intercedes? Estamos en una ciudad que necesita humillarse a los pies de Cristo para salvarse y transformarse, pero sólo el pueblo de Dios puede entrar confiadamente a su presencia e interceder por Venezuela.
Pastor Samuel Olson
Culto dominical 6 de diciembre de 2015
